Hipismo Arabia Saudita
En la época en que su Majestad el Rey Abdul Aziz, este propició que se llevaran a cabo las primeras carreras al Noreste de Riad para su propio disfrute. En estas carreras competían los hijos del rey con caballos de su propiedad y también con los caballos de algunos de sus hijos que heredaron el interés de su padre por la hípica.
Tiempo después, se creó un hipódromo y establos para las competencias, más o menos en el año 1963, el Príncipe Abdullah Bin Adbul Aziz, sintió un deterioro en el deporte debido a la falta de organización adecuada y convocó a una reunión con las personas interesadas para corregir la situación. En el año 1965 la iniciativa se completó con la creación del Club de Jockey de Riad, entidad reguladora en el reino. Tras la creación del club, se le encomendó la presidencia al Príncipe Abdullah quien decretó mejoras para el hipódromo y por fin la primera carrera de caballos oficial se llevó a cabo em Al Malaz. Las carreras de caballos continuaron en este hipódromo por unos años hasta que se hizo evidente que la propiedad era insuficiente para llevar a cabo todas las actividades propuestas y la expansión del deporte en el reino, además su ubicación ya no era conveniente para movilizar a los caballos. Debido a este se propuso la construcción de un hipódromo de grandes proporciones a nivel internacional que pudiera cumplir mejor con los objetivos del reino.
El corazón de las carreras en Riad se encuentra en el hipódromo King Abdulaziz, inaugurado en el 2003, con instalaciones vanguardistas, un imponente ovalo de pasto y arena ampliamente iluminado por las noches. La pista es un escaparate del patrimonio ecuestre en Arabia Saudita, recibe su nombre en honor al fundador del país, el Rey Abdulaziz y su bisnieto, el príncipe Bandar, es el presidente actual del Jockey Club de Arabia Saudita.
La temporada hípica en Riad típicamente inicia en octubre y termina con la Copa Saudita a finales de febrero. El hipódromo alberga carrera durante toda la temporada con un valor promedio diario de $30000 cada una. Para los fanáticos de la hípica, esta es una oportunidad de ver a los mejores caballos del mundo en acción, para los que no lo son, representa una espectacular oportunidad de codearse con personas de todas las edades, nacionalidad, y orígenes.